Esta madrugada terminó el horario de verano en NSW, por lo que atrasamos los relojes una hora. Un efecto curioso es que la diferencia horaria entre España y Sydney varía entre 8 y 10 horas, dependiendo de la época del año. Cuando en España se adelantan los relojes, en Sydney se atrasan, y viceversa. Pero no lo hacemos el mismo fin de semana, sino con un par de semanas de diferencia, así que tenemos un periodo de transición en el que la diferencia es de 9 horas.
Esta anécdota sin mayor importancia me sirve de pie para subir al blog una foto de un reloj de la Estación Central de Sydney que se conserva sólo por su valor artístico-histórico y no por su utilidad práctica, como advierte el cartel.
Espero que nadie lea la hora desde lejos porque ese mini cartel no le iba a ayudar :)
ResponderEliminarSeguro que más de uno ha perdido el tren :)
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